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El resurgir de una leyenda. Cap 1-4.5 (Historia participativa)[Español]


kibo

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La idea ganadora es David así que lo veremos mucho más en la vida de nuestro querido Michel, gracias a todos los que participan.

Capítulo 3 Una creciente necesidad.

 

Pasó tres días desde el lunes así que hoy es jueves, apenas y pase los exámenes, mis notas no están en peligro pero a largo plazo si, pues no eh dejado de pensar en algo, mejor dicho el sueño de ese hombre Amari ha estado en mis pensamientos más profundos mis sueños más lúcidos y mis escapadas mentales, siempre diciendo lo mismo una y otra vez «reclama mi regalo, conviértete en la bestia que no llegue a ser, déjame ayudarte». No sé si estoy loco, no sé si fue sólo la culpa, no sé si realmente tiene sentido eso. Lo que si es que no he ido al gym desde entonces y siento que ya mi cuerpo lo pide, pide moverse y levantar peso, estar activo, pero no sé si pueda volver a el mismo gym, quizá buscaré uno en la tarde.

Ya por la tarde tenía mi bolsa de ejercicio y me estaba dirigiendo al camino de siempre al gym de siempre, por más que buscara no podía permitir pagarme o la membresía o el transporte de otro gym. Me asomé un poco a ver quién estaba pero los recuerdos y esa voz grave volvió, no puedo en verdad que no puedo, me carcome la culpa y yo…

— Auch… hey con cuidado trata de levantar la vista hermano. — Dijo David después de chocamos, no lo ví no me fijé a dónde iba sólo iba a irme lejos pero los pectorales grandes y firmes de David se interpuso en mi camino cuando iba con la mirada caída, me despejó de todo pensamiento del momento.

— Yo… ah ¡Lo siento! No me fijé por dónde iba perdona. — me separó de él y me disculpé sonrojado, no sólo por apoyar casi que mi cara entera en esas almohadas duras que llama pectorales sino que también creo que llegue a sentir su pezón izquierdo.

— No te preocupes, solo trata de mantener la cara en alto, así no te golpeas con más gente y no pareces tan bajito. — se ríe un poco pero con dulzura, una pequeña broma entre amigos así es como se siente.

— No soy tan pequeño, tú eres el grandote.

— Bueno 10 cm de diferencia no es mucho pero es una diferencia visible y más si estás agachado. Pero hablando de otro tema, ¿Por qué no has venido en tres días? Me tenías preocupado que te hayas rendido por no tener tanto avance.

Él tenía razón al pensar eso, se que 2 meses no es tanto como para verme como Hércules pero al menos lo suficiente para verse esa explosión que muchos tienen en qué ya ven unos ligeros cambios en uno mismo, quizá más mental pero es el tiempo suficiente para que una vez dentro realmente te cueste salir. Claro que me estoy manteniendo muy saludable pero vaya que no noto casi nada, quizá que ahora puedo soportar más en la cinta de correr.

— No era eso, tenía… exámenes y pues tomaron el tiempo que le daba al gym, pero ya los pasé y… vine para entrenar si. — verdad y mentira al mismo tiempo, claro que quiero hacer ejercicio pero no sé si aquí, dudaba querer entrar aunque ahora no ha venido ni un pensamiento intrusivo de Amari.

— ¡Perfecto! Entonces entremos. Hoy te haré sudar como nunca antes, quiero ver tu potencial al máximo y luego exigir ¡Más! Quizá puedas crecer igual que yo.

— ¡Ja! Ojalá, si fuera tan fácil varios de aquí medirían 2 m (6,5 ft) y pesando 250 kg (551 lb).

— Bueno, yo no fuí siempre el Hércules del gym, también tenía tu estatura en la secundaria y me hacían bullying por tener algo de sobrepeso, un verano luche no sólo por bajar de peso sino que construir mejor mi cuerpo, tratarlo bien, perdí alrededor de 20 kilos (44 lb) estaba encantado con los resultados y seguí por los 2 años que me quedaban en la secundaria, di un gran estirón con eso superando a mi hermano mayor no más grande que tú, así que es posible.

Creo que es la primera vez que me comparte algo de su vida personal y no cualquier cosa, supongo que fue trabajando también en la confianza estos años que ha estado en el gym. Puedo empatizar con esa historia pero me cuesta realmente imaginarme a él, esa cara atractiva en el cuerpo de un niño gordito y bajito, realmente él es una prueba viviente que la pubertad puede pegar duro y para bien. Fuimos a los casilleros y traté de buscar mi llave cuando por accidente encontré la llave número 23, me quedé observándola un rato y volviendo esa voz desde dentro de mi cabeza « Reclama el regalo, llega más allá de lo que nunca pude, acéptame». Todos esos pensamientos fueron otra vez interrumpidos cuando escuché la voz de David.

— Hey, ¿Está bien? ¿Por qué te quedas viendo tu llave?

— Oh eh… no es nada, creo que me confundí de llave debe de ser de alguien más.

— ¿Queeee? Jeje ¿Qué haces con la llave de otro miembro del gym? ¿Acaso lo estás acosando? Vente acá ¡pequeño pervertido! — Me agarra la cabeza para hacerme cerillito pero ligero.

— ¡No! No… ¡Basta!

Y sin darme cuenta él me arrebata la llave y la observa también por un rato, logro zafarme de su agarre para luego verlo a él con la vista perdida en la misma llave, esa sonrisa de mi cara se va difuminando cuando hizo click algo en mi cabeza, la idea de que él fuera seducido por la misma voz, ese deseo, el regalo que se me prometió que pareciera que nunca fue mío. Una necesidad nació, el deseo una envidia de cómo se me escapó la única oportunidad que a nadie más se le dió a punto de perderse, no supe realmente si era yo quien produjo el sentimiento pero estaba claro que conscientemente ahora no quería compartir, lo hice mío de nuevo, arrebatando ¡Mi! Llave.

— Creo que me equivoqué, está llave es mía. — Aclaré mientras habría el casillero.

— Si… si es cierto, lo siento. Hey cámbiate y te espero en los espejos para calentar. — Contesta algo lento aún con la vista un poco perdida.

Cuando se fue pude volver en mí mismo y pregúntame «¿Qué pasó?» yo no actúo así, él tampoco… todo es por la llave pero, supongo que realmente no le dejará en paz hasta que realmente haga algo, y dársela a alguien más o que alguien me la quite de siente doloroso, ignorarla hace que este en mi cabeza, pide no, exige a gritos que la use. Abrí el casillero esperando a que quizá con éso apaciguara al demonio o lo que sea que está detrás de todo esto, ahí estaba la misma ropa tal y como la dejé la última vez, y como esa misma ves el olor hizo acto de presencia acariciando mis fosas nasales, pase un pequeño rato adorando esas prendas sólo que a diferencia que el lunes no estaba tan caliente, el sentimiento era más a nostalgia que placer sexual, llevándome a una época que nunca experimenté pero juraba que llegue a vivir, los días dorados de este establecimiento, lleno de hombres dispuestos a alcanzar un solo objetivo claro, crecer, ese gusto casi masoquista por levantar todo el día estando sudando como pavo al horno y sentir cómo es que cada célula de tus músculos aúlla de un dolor gustoso que se traduce más tarde en más volúmen, la masculinidad y testosterona en abundancia, un paraíso que quisiera volver a ver.

Me cambié de ropa, salí a ver a David y casi se sintió que en un parpadeo estaba despertando en mi cama fuera de las sábanas casi desnudo excepto por que dormí con calcetines, sólo que al parecer hice un cambio que no me dí cuenta hasta esta mañana, me puse las calcetas grandes de Amari, ese desgastado, el agujero del pulgar y lo grandes que eran para mis pies. Me levanté y examine mi cuerpo, todo estaba en orden, mi ropa estaba tirada junto a la cama y mi celular al lado de la almohada, iba a quitarme los calcetines pero se sentía muy cómodos aunque parece que los llene de mi propio sudor. Si te soy sincero no recuerdo nada del ejercicio que hice este jueves pero amanecí muy adolorido de todo el cuerpo, creo que David no mentía que me iba a exprimir hasta mi máximo y un poco más.

Era viernes ya por muy extraño que se sintiera, siento que me arrebataron medio día sin saber que hice, así se debe sentir uno después de una cruda, creo… Me quité los calcetines y pude ver mis propios pies de talla 9 US, picaban y dolían algo, ojalá y no haya contraído pie de atleta, una cosa más me extraño y es que creo que el olor de los calcetines ese olor característico de Amari que tanto había disfrutado ya no estaba sólo el mío. Tiré los calcetines a la ropa sucia y me preparé para ir a la universidad, ya tendré tiempo para pensar que pasó esa noche me dije.

Sólo que en el transcurso del día me estaban pasando cosas muy raras, en el camino al autobús venía platicando con unos compañeros pero en el transcurso mi voz se fue quebrando un poco, lo asocié a qué quizá me estaba enfermando, pero más tarde también me comenzó a dar bastante comezón la barba, como si no me hubiera afeitado y tuviera un cubrebocas que hace rozar la barba con mi piel, también algo en las axilas y hablando de esa parte creo que olvide mi desodorante o algo pasó que puedo sentir cómo corre unas gotas de sudor por mis costillas con sólo cargar mi mochila por los pasillos. Preocupado fuí al médico de la universidad el cual casualmente le tocó turno de práctica a mi roomy Carl para atender a los pacientes.

— Siguiente, espera… ¿Michel? — preguntó Carl un poco extrañado de verme por este lugar, casi no hablamos en el departamento así que es un poco incómodo.

— Si.. vine por que creo que me esta dando un resfriado o algo, mi voz esta rara y hace bastante calor.

— Bien, soló cuentame que pasa mientras me dejas revisarte un poco, y no te desvíes mucho del tema… no quiero que lo hagas incómodo. — ¿incómodo? ¿de qué está hablando? no lo vi esta mañana cuando yo…oh… creo que me vio desnudo.

— no te preocupes, iré al grano. — le respondi tratando de hacerme el tonto de no saber a que se refiere.

Unos minutos más tarde después de contarle mis experiencias en la uni esta mañana y que él sacara muchas pruebas de peso, altura, sangre, etc. (Al parecer tenía que actualizar mi cartilla médica) llegó a la conclusión que todo estaba en orden, soló que con una notoria diferencia de aumento de testosterona y hormona de crecimiento en mi sangre a comparación de mi último registro. (¿Debería preocuparme que tengan tanta de mi información personal?) Al final me dijo que si notaba otros síntomas o algo fuera de lugar que volviera con él a la misma hora 5 hrs de la tarde excepto los viernes. Siempre es tan cuadrado en este tipo de cosas Carl.

llegando al departamento después de unas compras estaba cansado y fastidiado de mis tenis, no era tanto el tiempo que caminé pero se sentía que lo hice por kilómetros, mis suelas me estaban matando. Dejé las compras en el refri y me quite los tenis pisando los talones, se que no se debía hacer pero era la opción más rápida, y una vez liberado me quité los calcetines y masajee mis pies en la cama por un rato, la sensación se sentía divina pero el hambre aguarda, me puse mis sandalias para ir al baño y… ¿Mis dedos siempre sobresalieron de mis sandalias?

-----------------------------

¿En qué cosa quieren enfocar su crecimiento primero?

- Músculos

- Altura 

- Masculinidad

- Dominancia

Gracias a todos los que comentaron ❤️

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Las cosas del casillero 23 estan alli para que sean tomadas y usadas. Np omporta el usuario. Me encanta como cualquiera pudo encontrar ese tesoro y a su vez nadie se atrevio a aveiguar que habia alli,

Me gustaria que cambiara su diminancia, volverlo mas dominante mientras aun es "pequeño" y verlo tratar de dominar a otros y cuando va creciendo simplemente aumentar esa cosa que lo hace dominante.

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On 11/16/2022 at 11:37 PM, kibo said:

La idea ganadora es David así que lo veremos mucho más en la vida de nuestro querido Michel, gracias a todos los que participan.

Capítulo 3 Una creciente necesidad.

 

Pasó tres días desde el lunes así que hoy es jueves, apenas y pase los exámenes, mis notas no están en peligro pero a largo plazo si, pues no eh dejado de pensar en algo, mejor dicho el sueño de ese hombre Amari ha estado en mis pensamientos más profundos mis sueños más lúcidos y mis escapadas mentales, siempre diciendo lo mismo una y otra vez «reclama mi regalo, conviértete en la bestia que no llegue a ser, déjame ayudarte». No sé si estoy loco, no sé si fue sólo la culpa, no sé si realmente tiene sentido eso. Lo que si es que no he ido al gym desde entonces y siento que ya mi cuerpo lo pide, pide moverse y levantar peso, estar activo, pero no sé si pueda volver a el mismo gym, quizá buscaré uno en la tarde.

Ya por la tarde tenía mi bolsa de ejercicio y me estaba dirigiendo al camino de siempre al gym de siempre, por más que buscara no podía permitir pagarme o la membresía o el transporte de otro gym. Me asomé un poco a ver quién estaba pero los recuerdos y esa voz grave volvió, no puedo en verdad que no puedo, me carcome la culpa y yo…

— Auch… hey con cuidado trata de levantar la vista hermano. — Dijo David después de chocamos, no lo ví no me fijé a dónde iba sólo iba a irme lejos pero los pectorales grandes y firmes de David se interpuso en mi camino cuando iba con la mirada caída, me despejó de todo pensamiento del momento.

— Yo… ah ¡Lo siento! No me fijé por dónde iba perdona. — me separó de él y me disculpé sonrojado, no sólo por apoyar casi que mi cara entera en esas almohadas duras que llama pectorales sino que también creo que llegue a sentir su pezón izquierdo.

— No te preocupes, solo trata de mantener la cara en alto, así no te golpeas con más gente y no pareces tan bajito. — se ríe un poco pero con dulzura, una pequeña broma entre amigos así es como se siente.

— No soy tan pequeño, tú eres el grandote.

— Bueno 10 cm de diferencia no es mucho pero es una diferencia visible y más si estás agachado. Pero hablando de otro tema, ¿Por qué no has venido en tres días? Me tenías preocupado que te hayas rendido por no tener tanto avance.

Él tenía razón al pensar eso, se que 2 meses no es tanto como para verme como Hércules pero al menos lo suficiente para verse esa explosión que muchos tienen en qué ya ven unos ligeros cambios en uno mismo, quizá más mental pero es el tiempo suficiente para que una vez dentro realmente te cueste salir. Claro que me estoy manteniendo muy saludable pero vaya que no noto casi nada, quizá que ahora puedo soportar más en la cinta de correr.

— No era eso, tenía… exámenes y pues tomaron el tiempo que le daba al gym, pero ya los pasé y… vine para entrenar si. — verdad y mentira al mismo tiempo, claro que quiero hacer ejercicio pero no sé si aquí, dudaba querer entrar aunque ahora no ha venido ni un pensamiento intrusivo de Amari.

— ¡Perfecto! Entonces entremos. Hoy te haré sudar como nunca antes, quiero ver tu potencial al máximo y luego exigir ¡Más! Quizá puedas crecer igual que yo.

— ¡Ja! Ojalá, si fuera tan fácil varios de aquí medirían 2 m (6,5 ft) y pesando 250 kg (551 lb).

— Bueno, yo no fuí siempre el Hércules del gym, también tenía tu estatura en la secundaria y me hacían bullying por tener algo de sobrepeso, un verano luche no sólo por bajar de peso sino que construir mejor mi cuerpo, tratarlo bien, perdí alrededor de 20 kilos (44 lb) estaba encantado con los resultados y seguí por los 2 años que me quedaban en la secundaria, di un gran estirón con eso superando a mi hermano mayor no más grande que tú, así que es posible.

Creo que es la primera vez que me comparte algo de su vida personal y no cualquier cosa, supongo que fue trabajando también en la confianza estos años que ha estado en el gym. Puedo empatizar con esa historia pero me cuesta realmente imaginarme a él, esa cara atractiva en el cuerpo de un niño gordito y bajito, realmente él es una prueba viviente que la pubertad puede pegar duro y para bien. Fuimos a los casilleros y traté de buscar mi llave cuando por accidente encontré la llave número 23, me quedé observándola un rato y volviendo esa voz desde dentro de mi cabeza « Reclama el regalo, llega más allá de lo que nunca pude, acéptame». Todos esos pensamientos fueron otra vez interrumpidos cuando escuché la voz de David.

— Hey, ¿Está bien? ¿Por qué te quedas viendo tu llave?

— Oh eh… no es nada, creo que me confundí de llave debe de ser de alguien más.

— ¿Queeee? Jeje ¿Qué haces con la llave de otro miembro del gym? ¿Acaso lo estás acosando? Vente acá ¡pequeño pervertido! — Me agarra la cabeza para hacerme cerillito pero ligero.

— ¡No! No… ¡Basta!

Y sin darme cuenta él me arrebata la llave y la observa también por un rato, logro zafarme de su agarre para luego verlo a él con la vista perdida en la misma llave, esa sonrisa de mi cara se va difuminando cuando hizo click algo en mi cabeza, la idea de que él fuera seducido por la misma voz, ese deseo, el regalo que se me prometió que pareciera que nunca fue mío. Una necesidad nació, el deseo una envidia de cómo se me escapó la única oportunidad que a nadie más se le dió a punto de perderse, no supe realmente si era yo quien produjo el sentimiento pero estaba claro que conscientemente ahora no quería compartir, lo hice mío de nuevo, arrebatando ¡Mi! Llave.

— Creo que me equivoqué, está llave es mía. — Aclaré mientras habría el casillero.

— Si… si es cierto, lo siento. Hey cámbiate y te espero en los espejos para calentar. — Contesta algo lento aún con la vista un poco perdida.

Cuando se fue pude volver en mí mismo y pregúntame «¿Qué pasó?» yo no actúo así, él tampoco… todo es por la llave pero, supongo que realmente no le dejará en paz hasta que realmente haga algo, y dársela a alguien más o que alguien me la quite de siente doloroso, ignorarla hace que este en mi cabeza, pide no, exige a gritos que la use. Abrí el casillero esperando a que quizá con éso apaciguara al demonio o lo que sea que está detrás de todo esto, ahí estaba la misma ropa tal y como la dejé la última vez, y como esa misma ves el olor hizo acto de presencia acariciando mis fosas nasales, pase un pequeño rato adorando esas prendas sólo que a diferencia que el lunes no estaba tan caliente, el sentimiento era más a nostalgia que placer sexual, llevándome a una época que nunca experimenté pero juraba que llegue a vivir, los días dorados de este establecimiento, lleno de hombres dispuestos a alcanzar un solo objetivo claro, crecer, ese gusto casi masoquista por levantar todo el día estando sudando como pavo al horno y sentir cómo es que cada célula de tus músculos aúlla de un dolor gustoso que se traduce más tarde en más volúmen, la masculinidad y testosterona en abundancia, un paraíso que quisiera volver a ver.

Me cambié de ropa, salí a ver a David y casi se sintió que en un parpadeo estaba despertando en mi cama fuera de las sábanas casi desnudo excepto por que dormí con calcetines, sólo que al parecer hice un cambio que no me dí cuenta hasta esta mañana, me puse las calcetas grandes de Amari, ese desgastado, el agujero del pulgar y lo grandes que eran para mis pies. Me levanté y examine mi cuerpo, todo estaba en orden, mi ropa estaba tirada junto a la cama y mi celular al lado de la almohada, iba a quitarme los calcetines pero se sentía muy cómodos aunque parece que los llene de mi propio sudor. Si te soy sincero no recuerdo nada del ejercicio que hice este jueves pero amanecí muy adolorido de todo el cuerpo, creo que David no mentía que me iba a exprimir hasta mi máximo y un poco más.

Era viernes ya por muy extraño que se sintiera, siento que me arrebataron medio día sin saber que hice, así se debe sentir uno después de una cruda, creo… Me quité los calcetines y pude ver mis propios pies de talla 9 US, picaban y dolían algo, ojalá y no haya contraído pie de atleta, una cosa más me extraño y es que creo que el olor de los calcetines ese olor característico de Amari que tanto había disfrutado ya no estaba sólo el mío. Tiré los calcetines a la ropa sucia y me preparé para ir a la universidad, ya tendré tiempo para pensar que pasó esa noche me dije.

Sólo que en el transcurso del día me estaban pasando cosas muy raras, en el camino al autobús venía platicando con unos compañeros pero en el transcurso mi voz se fue quebrando un poco, lo asocié a qué quizá me estaba enfermando, pero más tarde también me comenzó a dar bastante comezón la barba, como si no me hubiera afeitado y tuviera un cubrebocas que hace rozar la barba con mi piel, también algo en las axilas y hablando de esa parte creo que olvide mi desodorante o algo pasó que puedo sentir cómo corre unas gotas de sudor por mis costillas con sólo cargar mi mochila por los pasillos. Preocupado fuí al médico de la universidad el cual casualmente le tocó turno de práctica a mi roomy Carl para atender a los pacientes.

— Siguiente, espera… ¿Michel? — preguntó Carl un poco extrañado de verme por este lugar, casi no hablamos en el departamento así que es un poco incómodo.

— Si.. vine por que creo que me esta dando un resfriado o algo, mi voz esta rara y hace bastante calor.

— Bien, soló cuentame que pasa mientras me dejas revisarte un poco, y no te desvíes mucho del tema… no quiero que lo hagas incómodo. — ¿incómodo? ¿de qué está hablando? no lo vi esta mañana cuando yo…oh… creo que me vio desnudo.

— no te preocupes, iré al grano. — le respondi tratando de hacerme el tonto de no saber a que se refiere.

Unos minutos más tarde después de contarle mis experiencias en la uni esta mañana y que él sacara muchas pruebas de peso, altura, sangre, etc. (Al parecer tenía que actualizar mi cartilla médica) llegó a la conclusión que todo estaba en orden, soló que con una notoria diferencia de aumento de testosterona y hormona de crecimiento en mi sangre a comparación de mi último registro. (¿Debería preocuparme que tengan tanta de mi información personal?) Al final me dijo que si notaba otros síntomas o algo fuera de lugar que volviera con él a la misma hora 5 hrs de la tarde excepto los viernes. Siempre es tan cuadrado en este tipo de cosas Carl.

llegando al departamento después de unas compras estaba cansado y fastidiado de mis tenis, no era tanto el tiempo que caminé pero se sentía que lo hice por kilómetros, mis suelas me estaban matando. Dejé las compras en el refri y me quite los tenis pisando los talones, se que no se debía hacer pero era la opción más rápida, y una vez liberado me quité los calcetines y masajee mis pies en la cama por un rato, la sensación se sentía divina pero el hambre aguarda, me puse mis sandalias para ir al baño y… ¿Mis dedos siempre sobresalieron de mis sandalias?

-----------------------------

¿En qué cosa quieren enfocar su crecimiento primero?

- Músculos

- Altura 

- Masculinidad

- Dominancia

Gracias a todos los que comentaron ❤️

Increíble parte, sería interesante que la esencia de Amari solo la pueda sentir Michel por más que lavara las prendas, yo voto por la *altura y dominancia* que se sienta cada vez más seguro, que a medida que pasen los días la horma de crecimiento vaya haciendo lo suyo primero, mietras los demás van notando su cambio 

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Para mi sería crecimiento de MÚSCULOS… para eso es estamos en el foro? No? Jeje. Ojalá en el siguiente capítulo ya haya alguna transformación… hasta ahora no ha habido mucho ! Ja ! 

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22 hours ago, mworshipper said:

Para mi sería crecimiento de MÚSCULOS… para eso es estamos en el foro? No? Jeje. Ojalá en el siguiente capítulo ya haya alguna transformación… hasta ahora no ha habido mucho ! Ja ! 

Hey, tranquilo xb. Se que no a habido mucho crecimiento, pero te digo yo que desde este punto irá a más.

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